Las constantes lluvias en el territorio hondureño, desnudaron la vulnerabilidad del país, ocasionaron daños e inundaciones en varios departamentos, razón por la cual se decretó emergencia nacional por noventa días. El apoyo de las Fuerzas Armadas llegó a las zonas afectadas, a fin de salvaguardar la vida de nuestros compatriotas y sus bienes.
Las primeras acciones en respuesta a la población fue la asistencia humanitaria para los afectados, evaluación de daños y el monitoreo de los ríos.
En el departamento de Cortés, el Comando de la 105 Brigada de Infantería y sus unidades orgánicas se desplegaron para el auxilio de las familias damnificadas en el Valle de Sula, en apoyo a los Comité de Emergencia Municipal (CODEM) en las tareas de evacuación y el traslado de la población afectada.
Los trabajos solidarios, desde el traslado de víveres y medicamentos a los albergues instalados en la zona norte del país, vía terrestre hasta el rescate de personas ha sido una contribución invaluable.
En las instalaciones de la Escuela José Cecilio del Valle, del sector de la Aldea Santiago, las Fuerzas Armadas, apoyó con seguridad la Brigada Médica que se desarrolló en beneficio de los afectados por inundaciones provocadas por el desbordamiento del Río Ulúa.
El Décimo Cuarto Batallón de Infantería, en la ciudad de El Progreso, Yoro, realizó el traslado de damnificados al albergue instalado en la Escuela Álvaro Contreras de la aldea Brisas de La Libertad. Así como la seguridad a la brigada médica móvil.
En el occidente del país, a través del Séptimo Batallón de Infantería, se realizaron tareas de evacuación preventiva en las comunidades de Las Monas, El Trigo, La Unión y Copán.
Mediante el monitoreo de incidencias a nivel nacional, el Décimo Segundo Batallón de Infantería, verificó los deslizamientos de tierra en el caserío de Bañadores, Concepción, Copán.
En el departamento de Santa Bárbara, el Segundo Batallón de Artillería de Campaña activó las labores de auxilio a la población con la habilitación de tramos carreteros.
En la zona Nor-oriental del país, el Décimo Sexto Batallón de Infantería, realizó evacuaciones en los sectores de Zaragoza, La Concepción, Juticalpa, Olancho.
Mientras en el oriente del país, el Noveno Batallón de Infantería dio seguimiento a las incidencias provocadas por las lluvias, con la remoción de escombros, limpieza y habilitación del paso de vehículos livianos en el departamento de El Paraíso.
En la ciudad de Siguatepeque, los ingenieros militares emplearon maquinaria y recurso humano del Primer Batallón de Ingenieros, indispensable en el dragado de cunetas y ríos, limpieza, recolección de basura, acarreo de material y remoción de escombros.
Por su parte efectivos del Décimo Batallón de Infantería, efectuaron el despeje de carreteras en la ciudad de Márcala, la Paz.
De esta manera la solidaridad de los miembros del Ejército, se materializo en los cuatro puntos cardinales del país, ratificando la vocación de servicio de los hombres y mujeres que abrazan la noble carrera de las armas.
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