En una contundente acción coordinada, las Fuerzas Armadas de Honduras (FF.AA.), a través del Comando de Apoyo al Manejo de Ecosistemas y Ambiente (C-9), en colaboración con el Tercer Batallón de Protección Ambiental y la Policía Militar del Orden Público (PMOP), lograron la detención de tres individuos que fueron sorprendidos in fraganti mientras cometían el delito de aprovechamiento ilegal de productos forestales en un taller de carpintería ilegal. El exitoso patrullaje se llevó a cabo en el departamento de Santa Bárbara, evidenciando el compromiso de las autoridades en la lucha contra la deforestación y la protección de los recursos naturales del país.
Durante la exhaustiva inspección realizada en el lugar de la detención, las autoridades identificaron una serie de graves delitos ambientales. Se descubrió un taller clandestino operando al margen de la ley, así como la devastadora deforestación de seis valiosos árboles: dos pinos, cuatro árboles de guama que ya habían sido talados y procesados, y dos árboles de San Juan. Este hallazgo subraya el impacto negativo de la tala ilegal en los ecosistemas locales y la pérdida de biodiversidad que conlleva.
Como resultado directo del operativo, se procedió al decomiso de una considerable cantidad de herramientas y productos forestales obtenidos de manera ilícita. Entre los elementos confiscados se encuentran una motosierra, una sierra circular de mesa, una sierra circular de mesa improvisada y una canteadora. Además, se decomisaron aproximadamente 300 pies cúbicos de madera aserrada de cedro y unos 750 pies cúbicos de madera aserrada de guama, lo que representa un importante golpe a las redes de tráfico ilegal de madera en la región.
Tras su detención, los tres individuos fueron trasladados a las oficinas de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) en Quimistán, Santa Bárbara. Allí, se iniciará el proceso legal correspondiente para determinar su responsabilidad en los delitos ambientales flagrantes. Las investigaciones preliminares revelaron que los detenidos carecían de los permisos necesarios para la operación de la motosierra y no contaban con la licencia de apertura y actividad para la fabricación de muebles, lo que agrava aún más su situación legal.
Esta exitosa operación conjunta reafirma el compromiso de las Fuerzas Armadas y las instituciones de seguridad del Estado hondureño en la defensa del medio ambiente y el cumplimiento de la ley. Las autoridades han enfatizado que continuarán intensificando los patrullajes y las acciones de control en todo el territorio nacional para frenar la tala ilegal, proteger los bosques y garantizar la sostenibilidad de los recursos naturales para las futuras generaciones.